Aprendí
que crecer, no siempre significa avanzar… Que muchas veces amar, no implica
necesariamente dar…
Y
en esta paradoja de la vida… en donde sentimientos se mueven en espiral… “hay
gente que llora de alegría… y otras que
ríen, porque melancólicas están”.
Por
eso a menudo pienso… lo hermoso que es vivir siendo genuino de verdad… Quizás
porque imagino que algún día… mi alma gemela me conocerá.
Sí!
Tengo ese sueño de niña… no es Príncipe… ni Héroe que con su espada me
rescatará… es tan solo un corazón que anda yirando… dando vueltas… intentando
descubrir quien lo acompañará.
Tal
vez el sendero no sea eterno… posiblemente vericuetos imprevistos los
sorprenderán… lo importante es la impronta que vayan dejando… a lo largo de su
caminar.
Sueña,
ríe y quiere… dalo todo sin temor… que aunque duela o no sea lo que esperabas…
siempre nació de tu corazón. Ése que no sabe de razones… que errante comparte su amor… que sonríe sin que nadie lo mire… cuando recuerda lo
feliz que supo ser con vos.
“Dame
tu mano… no te soltaré nunca” … (le digo a mi Alma, que hoy un año más cumplió)...
y sonrío a esa luna confidente… que tantos besos, en mis suspiros llevó…
(Sirena
de escamas azules… en algún sitio existe tu Tritón).
